ANAC revoca el certificado de operador aéreo de Voepass

El organismo regulador de la aviación civil en Brasil ha tomado esta decisión tras detectar reiteradas omisiones de mantenimiento, incluso después de un accidente con 62 víctimas mortales.
Pedro Carvalho

Pedro Carvalho


Publicado originalmente el 25/06/2025 - 22:35 CET
Actualizado: 25/06/2025 - 22:35 CET

ANAC ya había suspendido provisionalmente el COA de Voepass en marzo de este año alegando "incapacidad de la aerolínea para resolver las irregularidades identificadas durante la supervisión, así como la violación de las condiciones previamente establecidas para la continuidad de la operación dentro de los estándares de seguridad exigidos". Tres meses después, tras desestimar el recurso de la compañía, esta decisión se torna definitiva.

El vuelo 2283 de Voepass Linhas Aéreas se estrelló el 9 de agosto de 2024 en un área residencial en el municipio de Vinhedo, São Paulo, después de entrar en un descenso en espiral, falleciendo sus 62 ocupantes.
El vuelo 2283 de Voepass Linhas Aéreas se estrelló el 9 de agosto de 2024 en un área residencial en el municipio de Vinhedo, São Paulo, después de entrar en un descenso en espiral, falleciendo sus 62 ocupantes.

El 9 de agosto de 2024, un ATR 72-500 de Voepass, matrícula PS-VPB , que cubría la ruta Cascavel-São Paulo con el número de vuelo 2283, se estrelló en una zona residencial de Vinhedo (estado de São Paulo), provocando la muerte de las 62 personas que iban a bordo (58 pasajeros y 4 tripulantes, 62 personas en total). Aunque el informe preliminar del accidente no apunta a estas irregularidades como causa probable, fue un punto de inflexión y la Agencia Nacional de Aviación Civil de Brasil (ANAC) inició una operación asistida sobre la compañía, reforzando la supervisión técnica de su flota.

Sin embargo, entre el 15 de agosto de 2024 y el 11 de marzo de 2025, Voepass operó casi 2.700 vuelos con al menos siete aviones que no habían recibido las inspecciones de mantenimiento obligatorias. ANAC detectó que la aerolínea no solo omitió revisiones esenciales, sino que reincidió en sus fallos pese a las advertencias.

Según Anac, esto era “una indicación de que el sistema de supervisión de la empresa se había degradado, comprometiendo su capacidad de actuar preventivamente”.

“Es importante tener en cuenta que los problemas operativos se pueden encontrar y solucionar en las aerolíneas. Sin embargo, lo que Anac identificó, en el caso de Voepass, fue la pérdida de confiabilidad de los mecanismos internos de detección y corrección de problemas, así como la caracterización de una desviación de los procedimientos de mantenimiento establecidos para la empresa. Es decir, la estructura de la empresa ya no ofrece garantías de que cualquier falla sea abordada antes de comprometer la seguridad de las operaciones”, escribió Anac en una nota de prensa

El 11 de marzo de 2024, ANAC suspendió cautelarmente el COA de Voepass. La compañía interpuso recurso, pero el 24 de junio de 2025, el regulador revocó definitivamente el certificado, sin posibilidad de más apelaciones. En paralelo, se abrieron más de 15 procedimientos sancionadores y se impuso una multa superior a medio millón de reales.

Este caso no refleja un simple error técnico, sino una quiebra estructural en la cultura organizativa de la empresa. Que se haya seguido volando durante meses con aeronaves no inspeccionadas, incluso después de un accidente fatal, revela una desconexión absoluta con los principios básicos de la seguridad aérea.

Como digo siempre, la seguridad aérea no es negociable, es la base misma de la aviación. Lo ocurrido con Voepass es un recordatorio de lo que está en juego cuando el mantenimiento se ve como un coste y no como lo que es: un salvavidas.

Comunicado de la ANAC (en portugués): Anac cassa certificado de operador aéreo da Passaredo, principal empresa do grupo Voepass