Diez muertos al estrellarse un Cessna 208B en Alaska

Un avión Cessna 208B Grand Caravan EX operado por Bering Air, identificado con la matrícula N321BA, se ha estrellado este viernes 7 de febrero (6 de febrero en el lugar de los hechos por la diferencia horaria con España) en el hielo marino del Norton Sound, Alaska, a aproximadamente 34 millas al sureste de Nome, según ha informado Associated Press. Este accidente representa una de las peores tragedias de la aviación regional en Alaska en las últimas dos décadas, un estado que por sus características geográficas y climáticas dependen enormemente de la aviación para la conectividad de sus comunidades más remotas.

El vuelo, registrado como BRG445, partió de Unalakleet Airport (UNK/PAUN) con destino a Nome Airport (OME/PAOM) en un trayecto de transporte de pasajeros programado. En la aeronave viajaban nueve pasajeros y un piloto. Todos ellos han perdido la vida en el accidente. La aeronave, fabricada en 2020, quedó completamente destruida tras el impacto.

El vuelo BRG445 de Bering Air despegó de la pista 33 del aeropuerto de Unalakleet a las 14:38 LT, estableciendo rumbo 287° sobre las aguas del Norton Sound en dirección a Nome. La aeronave alcanzó una altitud de crucero de aproximadamente 7.700 pies. A las 15:11 LT inició el descenso hacia Nome.

Según informa Aviation Safety Network, los últimos datos registrados por el sistema ADS-B (Automatic Dependent Surveillance–Broadcast) indican que a las 15:16:34 la aeronave se encontraba en descenso a través de 5.300 pies, a 38 millas náuticas del aeropuerto de destino. Poco después, la aeronave experimentó un evento que resultó en una rápida pérdida de altitud y velocidad, lo que sugiere una posible pérdida de control en vuelo (Loss of Control In-Flight, LOC-I). La desaparición de la señal ADS-B coincide con este momento.

Condiciones Meteorológicas

Según el Servicio Meteorológico Nacional, en el momento del accidente la temperatura en la región era de -8,3 °C (17 °F), con precipitaciones en forma de nieve ligera y visibilidad reducida debido a la presencia de niebla. Estas condiciones podrían haber sido un factor contribuyente al accidente.

Recuperación de la aeronave y operaciones de búsqueda

La Guardia Costera de EE. UU. localizó los restos de la aeronave en el hielo marino del Norton Sound. Dos rescatistas fueron desplegados en la escena, confirmando la ausencia de sobrevivientes. Fotografías proporcionadas por la Guardia Costera muestran la aeronave fragmentada y dispersa sobre el hielo.

Dada la dinámica del accidente y la inestabilidad del hielo en la zona, la operación de recuperación ha presentado dificultades significativas. Las condiciones meteorológicas y la formación de hielo joven (Young Ice) han obligado a los equipos de rescate a acelerar el proceso antes del deterioro de la zona.

La Junta Nacional de Seguridad en el Transporte (NTSB) ya ha abierto una investigación para determinar las causas de este siniestro y emitir recomendaciones para prevenir futuros incidentes de naturaleza similar.

Este artículo se actualiza conforme se reciba nueva información de fuentes oficiales